Las persianas no son un elemento estético de la ventana sin más. De hecho, sirven para controlar el paso de fenómenos atmosféricos variados desde el exterior al interior de la vivienda (y otros fenómenos no atmosféricos, como intrusos o ladrones) .
Aunque en muchos países –sobre todo, al norte de Europa- no es costumbre instalar persianas eléctricas o manuales (de las conocidas como “enrollables”, que pueden permanecer totalmente abiertas o totalmente cerradas, sin interferir en las vistas desde la ventana), en España es raro encontrar viviendas que no tengan.
Además de aislar la habitación de la luz (más que una cortina, por gruesa que sea), del ruido excesivo (frente al cual, a veces, un simple cristal no resulta suficiente) o del viento (que puede llegar a dañar los cristales, incluso a abrir una ventana antigua), las persianas ofrecen ciertas ventajas que aportan un mayor confort a la vivienda.
Privacidad, seguridad, aislamiento, ahorro… Vemos una a una qué ventajas aporta tener protección en las ventanas, dependiendo de si nos decidimos por persianas eléctricas o manuales.
Una persiana manual es una garantía de aislamiento frente a la luz, el ruido y el viento. Como cualquier otra persiana, esta es su baza principal, sin embargo tiene otra que consiste en que, al ser el sistema más usado, resulta sencillo y asequible que cualquier persona la pueda instalar en su hogar sin grandes complicaciones ni desembolsos.
Las persianas eléctricas o motorizadas llevan, como su nombre indica, un motor que las pone en marcha y que permite que suban o bajen mediante la acción de un interruptor o mando a distancia. Esto, que supone una mayor comodidad a todas luces, también hace que existan pros y contras de las persianas monitorizadas.
En ocasiones se alude a los problemas de las persianas eléctricas porque la costumbre nos hace inclinarnos primero por la opción de una persiana manual y también porque, normalmente, para su instalación, mantenimiento y reparación se precisa de ayuda experta. Sin embargo, la duda de por qué usar persianas eléctricas suele quedar sin discusión cuando hablamos en términos de seguridad.
Una persiana con motor, que no puede moverse con las manos y que, una vez cerrada, resulta hermética, supone un impedimento más frente a los ladrones.
La Policía insiste en que, cuando se trata de viviendas unifamiliares, los ladrones se intentan colar siempre por las ventanas, por lo que tener una persiana motorizada de seguridad que se queda anclada en la parte inferior (y que pesa cuatro veces más que las persianas convencionales), supone un elemento más que disuasorio.
Pide información a nuestros expertos y te asesorarán. Contacta con nuestro servicio de persianería para la reparación de persianas eléctricas.