En España estamos acostumbrados a tener persianas, no podemos estar sin ellas. Nos ayudan a regular la entrada de luz natural, aportan intimidad a nuestro hogar y contribuyen a cierto ahorro energético al ser una buena ayuda para mantener la casa caliente o fría. Por eso, si nos encontramos con la persiana rota, es habitual que tratemos de buscar una solución urgente. El arreglo de una persiana en Madrid es posible si sabes en manos de quién ponerte.
Estamos acostumbrados a que, con el uso, haya ciertas contrariedades derivadas de una persiana rota: la cinta enredada, las lamas torcidas, no sube o baja, se atasca o el motor hace un ruido raro, en el caso de las persianas eléctricas.
Todo tiene solución. Pero primero repasemos, una a una, las averías más habituales que sufren las persianas, sean estas manuales (enrollables) o eléctricas, para saber cómo solucionarlas:
Seguramente, el problema es que se ha roto la polea de enrollamiento de la cinta en el eje y, por eso, la cinta se va enrollando pero mal. Se hace un nudo o se encaja en cualquier sitio y por eso no deja que la persiana ruede. Se cambia la polea con el rodamiento y listo.
Cuando el problema que se plantea es que hay que cambiar la cinta de una persiana que está rota la solución es facilísima. De hecho, es muy habitual que esto ocurra con el uso y muchos usuarios se atreven a hacerlo ellos mismos. Para saber cuánta cinta hay que comprar, un truco: medir la distancia desde el soporte superior hasta el cajetín y multiplicar esa medida por tres.
Suele ser porque se ha enganchado al doblarse la cinta o porque una lama se ha salido o roto y hay que cambiarla o alinearla. Quizá es que el muelle o los flejes se han deteriorado o los topes están rotos. De todo esto hay recambio; un persianista lo arregla rápidamente.
Suele ser un problema del interruptor o del mando a distancia. También puede ser que se haya ido la luz, haya habido un cortocircuito dentro del interruptor o este se haya llevado un golpe que ha roto el mecanismo.
Lo notas porque hace ruido, se atasca o, directamente, ni sube ni baja. Si hay avería en el motor de la persiana eléctrica puede deberse a que se haya quemado por una sobrecarga eléctrica o alguien la haya forzado cuando estaba atascada.
Si el problema está en el eje, que parece resbalar, puede ser porque el tornillo que sujeta el motor al rodillo se ha caído o está flojo. Dicho todo esto, la avería más común en el motor de una persiana eléctrica es que baje pero no suba y eso es porque se ha quemado el condensador. Algo que solo puede solucionarse recurriendo a un experto que sepa hacer el arreglo de una persiana en Madrid.
Las cintas que unen persiana y eje se pueden salir. Por eso la persiana se tuerce y se queda atascada. Es tan fácil como recolocarlos o cambiarlos, si se han roto (se pueden romper si, una vez torcida, se fuerza a bajar).
Es porque el fin de carrera de la persiana, que es lo que le dice a la persiana que ha llegado abajo, se ha calibrado mal o, con el uso, se ha descalibrado. Para solucionarlo hay que acceder al motor, así que mejor llamar a un experto.
La avería puede darse en una persiana manual o en una eléctrica y son circunstancias muy diferentes de cara a buscar quién te lo repare.
Una persiana eléctrica consta de unos elementos (láminas articuladas, rulo-eje donde se enrollan las láminas, motor que mueve este eje y, por supuesto, sistema eléctrico que hace que se mueva) y, por tanto, las averías más habituales de las persianas eléctricas pueden estar en cualquiera de estas piezas.
Cuando hay que arreglar una persiana rota y esta es eléctrica, es importante saber que hay algunos arreglos que pueden estar en nuestra mano, pero no todos. Por ejemplo, si es un problema del interruptor, un electricista te lo cambia o, si es que el mando no funciona, puede ser tan sencillo como comprobar las pilas o cambiar el mando (o llévalo a reparar).
Ahora bien, si es el motor lo que falla porque la persiana hace ruidos o baja pero no sube, o no baja hasta el final, o las lamas se han torcido, lo mejor es acudir a un experto. No intentes desmontar el motor; necesitas encontrar quién te realice el arreglo de una persiana en Madrid.
En cuanto a las persianas manuales, es posible que se desprenda el eje, que se tuerzan los flejes y se enganchen las lamas, que sea necesario cambiar la cinta de la persiana rota o el problema se encuentre en el embudo de la persiana rota… En general, son arreglos sencillos pero conviene ponerlo en manos especializadas.
Pide información a nuestros expertos y te asesorarán. Contacta con nosotros y pregunta por el servicio de arreglo de persiana en Madrid.