No hay que tener miedo a hacer reformas en el salón, ya que es importante que se represente el estilo personal, el modo de vida propio y, además, es una estancia que puede experimentar un cambio sustancial solamente renovando los suelos, las texturas o acabados de las paredes ¡y los techos!.
A lo largo de este post analizaremos las diferentes formas de dar un aire nuevo al salón con pequeñas reformas de albañilería.
Es posible. De hecho, frecuentemente se recurre, dentro de las reformas en el salón, a cambiar los suelos o transformar las paredes para ganar más luz o mayor apariencia de amplitud; por restarle antigüedad o ganar en limpieza.
Pequeñas reformas de albañilería pueden obrar la diferencia; no es necesario tirar abajo techo y paredes. Sin ir más lejos, destacamos estas: cambio de suelos, retoque de techos, paredes con un toque especial, pintura y empapelado y cambio de las piezas principales de mobiliario.
Antes de que entren los albañiles, hay ciertos movimientos que conviene realizar:
Cambiar el suelo sin obras es fácil si los expertos te dicen cómo; no hace falta que sea la reforma de un salón pequeño. En caso de solo querer cambiar el suelo, es importante aclarar que hay una nueva generación de reformas que consigue sortear las antiguas pegas: escombros, tener la habitación inutilizada durante días o semanas, ruidos y otras molestias…
Hoy, más que un elemento estructural, el suelo se concibe como una forma de decoración, por lo que su cambio es sencillo y rápido. Todo ello, porque los nuevos formatos, en clave de lama, adhesivos, losetas, etc. son más fáciles de pegar o anclar al pavimento sin tener que levantar el suelo antiguo.
Los albañiles pueden poner suelo nuevo con las diferentes técnicas que más se usan actualmente, que son: micromortero o microcemento, suelos vinílicos, tarima de parquet flotante, linóleo o cerámica de colocación en seco.
Aunque es algo en lo que no toda la gente repara, el aspecto de un salón puede transformarse por completo si se le cambia el aspecto del techo. Puede actualizarse, aportar calidez a la estancia, acompañar a la decoración… Son varias las opciones que existen para realizar techos de salones modernos:
Una pared de ladrillo visto en el salón puede aportar un toque diferente y bohemio a una estancia, como de estética de loft, con poco esfuerzo. Se puede lograr picando la pared y dejando al descubierto el interior del tabique o poniendo ladrillo rústico ex profeso en la zona elegida. También existen vinilos con textura que reproducen de forma bastante realista el acabado de un ladrillo visto real que se coloca como papel pintado.
Lo ideal es reservar solo una pared para esta técnica decorativa. Por ejemplo, detrás del sofá o entre dos puertas de balcón.
En esta revisión de formas de hacer reformas en el salón sin obra, no podemos olvidar dos más:
Recurriendo a mobiliario minimalista y textiles en tonos neutros siempre será más sencillo conjugar lo nuevo y lo que había antes de la reforma.
Pide información a nuestros expertos y te asesorarán. Contacta con nuestro servicio de albañilería para reformas del salón.